El instalador de su caldera es la persona indicada para solucionar las averías en el aparato. Encontrará los datos del instalador de su caldera en la tarjeta de garantía rellenada o en el justificante de compra del aparato. Si tiene un contrato de mantenimiento, puede ponerse en contacto con la empresa de servicio. Este tipo de contrato es independiente de los años que tenga el aparato, es decir, que también es válido en los dos primeros años, cuando está en vigor la garantía de fábrica. Si su vivienda es de alquiler, póngase en contacto con el arrendador o con la cooperativa de viviendas.
La presión se puede consultar en la pantalla de servicio cuando el aparato está apagado. Si, durante el funcionamiento normal, la presión llega a estar por debajo de 0,5 bar, el valor aparecerá intermitente en la pantalla.
Para garantizar un buen funcionamiento de la instalación de calefacción, la presión ha de estar entre 1 y 2 bar. Esta es la presión de una instalación en frío. La presión se puede consultar en la pantalla de servicio cuando el aparato está apagado. Si, durante el funcionamiento normal, la presión llega a estar por debajo de 0,5 bar, el valor aparecerá intermitente en la pantalla.
Si la presión es demasiado baja, es preciso recargar de agua la caldera. Proceda como se indica a continuación:
Si tuviese que repetir esta operación varias veces al año, avise al instalador. Es posible que haya alguna fuga.
Después de recargar de agua la instalación, o cuando es nueva, es preciso purgarla. La presencia de aire en la instalación puede causar ruidos extraños. Para purgar la instalación, proceda como se indica a continuación: