Control de calderas a distancia
La función de manejo a distancia permite una sintonía óptima entre servicio y mantenimiento y el uso efectivo. Esta tecnología abre el camino al mantenimiento que deja de estar determinado por el calendario para adaptarse al estado real del aparato. Con el manejo a distancia, es posible establecer de manera sencilla el momento ideal, específico del aparato, para realizar las tareas de servicio y mantenimiento.
La función de manejo a distancia, en combinación con un dispositivo de enlace, utiliza una red de malla. Dicha red garantiza que todas las calderas de calefacción estarán conectadas con el dispositivo de enlace, si es preciso dando un rodeo. Dado que las calderas intercambian información entre ellas, siempre hay una ruta al dispositivo de enlace. Gracias a este sistema, la función de manejo a distancia es estable y se recupera automáticamente. La red de malla garantiza que todas las calderas de calefacción estarán conectadas con el dispositivo de enlace, si es preciso a través de desvíos. Además, para transferir la información, siempre se elegirá el camino más corto. La estabilidad del sistema permite que cada red pueda constar de hasta 246 calderas. Es un sistema ideal para cooperativas de viviendas que siguen (contratan) planes de mantenimiento programado. La distancia entre dos calderas deberá ser de 50 metros como máximo, más que suficiente para casi cualquier situación práctica.
Para poder leer los datos de mantenimiento de las calderas a distancia, será necesario establecer una conexión con el aparato. Si se produce una avería o se requiere mantenimiento, el instalador recibirá un aviso (por correo electrónico) y podrá leer en línea el rendimiento de la caldera, como las horas de encendido. El instalador tendrá acceso continuo a la información sobre una serie de parámetros, como el funcionamiento de la bomba, la temperatura y la presión del agua de cualquiera de las calderas.
A partir de la información disponible, el instalador podrá establecer el momento ideal para realizar el mantenimiento. El mantenimiento ya no se decidirá por el calendario, sino por el uso y el estado real del aparato.